Válvula

Ésto:

 -Aire, cosa y ahogo-

me ha estado siguiendo...

con sus manos filudas

me estruja  el pecho y la cara...

y,  no lo puedo evitar...

me han contado que nadie lo ha hecho,

seguro no seré  el primero.

Por lo menos

no estoy solo,

aunque no lo vea,

se que está cerca,

recordándome que debo permanecer aquí...

viendo todo desde la sombra.

Ja!

Pasé el indice, de arriba hacia abajo, ni suave ni fuerte, apoyando justo lo necesario para llevarme algo de ese color naranja. Tuve el breve impulso de llevarlo hasta mi boca, pero... del gran libro pasó una hoja atras de mi y supe que no era necesario. -Con su lomo marmoleado y olor a papel deshidratado siempre aparece a su antojo: Contiene sonidos, guardados mediante caprichosos rasgos en papel , hendiduras en pasta, punta de metal-. Retrocedí entonces dos segundos y aleje el índice naranja que iba hacia mi boca, lo vi como si no supiera quien era su dueño y con el pulgar quise saber de que se trataba ésto. Hay gestos que no nos pertenecen, que solo ponen en evidencia que no somos nadie, y al dar un paso hacia atras y mirar hacia arriba uno de ellos me pareció conocido... La niebla que todo lo duerme se fue disipando... no completamente, pero al menos lo suficiente para constatar mi recaída. Allí estaba, otra vez mas, parado frente al enorme portón, y lo que tenía en la yema del índice derecho era polvo de bisagras. No se, no puedo saberlo, cuantas veces he llegado hasta aquí, las imágenes se empujan unas a las anteriores y no llevan a un tiempo preciso.

Frutos de mi Tierra

Tejedor

Quisiera ser tejedor de momentos, ser el gran hilvanador, saber cuando hacer un nudo y pasar a otra madeja....
Pero allí está...el acompañante perfecto
los saltos dentro de las cavidades hacen que desvíe la atención,
y los animales o cualquier accidente universal me esconden la realidad.
No encuentro los cabos, cuando quiero recordar el último color ya ha comenzado a correr otro fondo
y empiezo a ir mas rápido para compensarlo.

Fuga Imposible

Me esmero en suponer los cantos del polígono que he de describir.
Tanto y tan intenso afán....que los vértices se comienzan a mover
mientras, yo, sigo andando.
Comienzan a pasar frente a mi las luces y artificios
signos y símbolos que desconozco
y encajes y ecos...
y mas ecos y luces
y ecos y luego, mi imaginaria creación pierde sus límites
se desintegra antes de su grito primario
y yo, sentado, viendo mas allá de la pared
su recuerdo.

Ya había estado aquí

..y porque se supone que deba sentir algo?
si no veo de que estás hecha.
Tu silueta no tiene bordes
estás hecha de adentro para afuera
las sombras no son de polvo.

asfalto

...deben estar haciendo unos 30 grados,
veo todos los pedacitos de piedra triturada atrapados
en el asfalto.
Quisiera dejarla en la próxima curva,
irme y no necesitarla mas,
pero esta caja de pino rústico
con forma y tamaño de ataúd,
lleva adentro grabado todo lo que he sentido
en la vida.

Creo que debería dejar aquí mi cara,
con la boca medio abierta
como si estuviera hablando...
e irme,
dejarla con ustedes,
dos milímetros...es todo.

Ésto -aire, cosa y ahogo- me ha estado siguiendo... con sus manos filudas me estruja el pecho y la cara... y, no se puede evitar... parece que nadie lo ha hecho, no seré el primero. Por lo menos no estoy solo, aunque no lo vea, se que está cerca, recordándome que debo permanecer aquí, viendo todo desde la sombra.

Aislantes

Tsssssssssssss ....es el amortiguador de turno,
escafandra y desprecio,
amarillo.
Van a penas tocando el suelo,
vas a caer de cara
Y de vuelta para arriba..... Tssssssssssssss

Relatividad

El derrumbe

El zumbido es constante,
esperado,
envolvente.
en un momento,
en un pequeño instante,
todo se vuelve calor...inevitablemente
al ver hacia atrás todo se cae,
vértigo, incertidumbre, necesidad,
necesidad...

Diez y ocho

Estoy persuadido de que así es, en la última media hora me he ido convenciendo de lo que ahora veo como un hecho confirmado en mi cabeza: Hay un mundo allá arriba. Subo reptando por las paredes de madera, me fundo en su triste color y llego a donde la luz no llega. La falta de un remate elegante me deja pasar sin mas tiempo que el necesario para llenar de aire mi pecho, y... allí está. una pulgada y media de finos recuerdos, de calor y lluvias, de gotas coléricas sobre la lámina, es ese mundo en donde hasta las arañas han muerto de tos, aquí el universo es otro, se detiene la arena y todo comienza y termina aquí. No hay nada mas, no cabe nada mas, es perfecto,se contiene a si mismo y no necesita a nadie.